Los balazos no paraban... Narra testigo

Aún con signos de pánico en su rostro, con temor a emitir algún comentario, y ante una calle desolada, donde la actividad comercial no se ha repuesto por completo tras el atentado que extraoficialmente cobró la vida de tres policías,  dos más que resultaron gravemente heridos, y cuatro más que aún se encuentran desaparecidos, la testigo relató el peor pasaje de su vida, mismo que tuvo que vivir en compañía de sus dos pequeños hijos. 

“Estaba en mi casa con mi familia y se empezaron a escuchar muchas detonaciones, fue un pánico general fueron como 15 minutos de disparos, estaba cocinando cuando empezó todo, le iba a dar de cenar a mi familia, estaba con mis dos hijos pequeños y una amiga”, dijo la entrevistada. 

Tomando un poco de aire, y con la mirada fija en el edifico oradado por los proyectiles disparados por manos crimínales,  la testigo continuó con su relato.

“Fueron muchos disparos, estaban disparándo afuera de la casa, agarré a mis niños y todos corrimos y nos tiramos al piso en el baño, pensamos que era un lugar para más seguridad, 

rápido me comuniqué con mis familiares para que supieran lo que estaba pasando, les dije que habían una balacera, ellos nos dijeron que permaneciéramos donde estábamos que era un lugar seguro y ellos mismos nos iban a hablar para decirnos que todo se había calmado, para poder salir de la vivienda”.

Agregó que “entramos en pánico, tuvimos que irnos de aquí por el pánico, sólo abrazaba fuerte a mis niños y quería que todo terminara, llegué a pensar que ahí quedábamos, que íbamos a morir, tenia mucho miedo por que se escuchaban disparos de todas partes”.

De la misma forma, mencionó que “fueron muchas detonaciones, mis hijos y yo estábamos gritando y llorando entramos en pánico, la verdad  ya no nos sentimos seguros, se supone que éstas oficinas son de respeto y la vedad ya no, no vimos nada, salimos hasta que las detonaciones terminaron, decidimos salirnos por miedo a que regresaran los que habían disparado, me siento insegura y más que nada con mucho miedo o pánico de salir, imagínense se supone que aquí es seguro  y que hay policías, pero pasó esto , imagínense en otro lado”.

Por último dijo que “ creo que mi casa no resultó afectada, según nada más casquillos que  hay afuera, pero hasta el momento no hemos sabido nada de eso, es la primera vez que vivimos algo así, años atrás que echaron bombas en la madrugada me tocó también, pero no era tan fuere como anoche, tenemos miedo de regresar, pero no tenemos de otra, no quiero vivir nuevamente algo así, en realidad pensé que íbamos a morir”, concluyó  la entrevistada y retomó su camino , en su mirada, la mujer aún reflejaba las escenas de terror que vivió en compañía de sus pequeños, en su mano llevaba algunas pertenencias dentro de una bolsa y estaba en camino a su casa, un lugar donde ella suponía que nada podía pasarle, un lugar donde podría estar segura con su familia, sin embargo, de ahora en adelante nada será igual.